Finalmente…KRUGER
Llegamos al nuevo campamento muy entusiasmados por haber visto a los leones en la ruta. Cuando estábamos haciendo el check-in escuchamos música para nuestros oídos…. Alguien atrás nuestro hablaba no solo castellano sino Argentino! Resultó que había dos chicos de Buenos Aires que se quedaban una noche más en el camping. Ellos estaban por 3 semanas de vacaciones en Sudáfrica y eran unos personajes! Esa noche aprovechamos para hablar nuestro amado idioma y tomar algunos Fernets (con sabor a lo conocido) que los chicos nos convidaron, MUY DIVERTIDO. Al lado había unos Vieneses, que pobres quedaban la mitad del tiempo afuera de la charla porque si bien intentábamos de hablar en inglés la mayoría del tiempo el inconsciente nos llevaba a hacer el switch al español.
Al día siguiente nos despedimos de nuestros nuevos amigos y nos fuimos rumbo al esperado safari en Kurger. Kurger es un parque nacional ENORME con una amplia variedad de especies. Cuando te venden el tour te dicen que van a tratar de hacerte ver “los grandes 5” y nosotros pensamos que era: León, Jirafa, Cebra, Rinoceronte e Hipopótamo pero estábamos equivocados porque las jirafas y cebras aparecen muy fácilmente, los “grandes 5” para ellos son animales que cuesta más ver porque son escondidizos y peligrosos: León, Leopardo, Rinoceronte, Búfalo, Elefante.
El safari estuvo bueno porque estuvimos el día entero dando vueltas en la camioneta por el parque y si bien por momentos no ves nada en otros ves muchos animales. Entre las cosas que vimos están: Jirafas, Cebras, Antílopes, Jabalíes, Hipopótamos, Rinocerontes (pero MUY de lejos), Búfalos, Leones, Mandriles, Elefantes, Zorros negros, Nox (o buey chino) y hasta una lechucita.
El paseo genial pero agotador por el calor y el madrugón, por suerte el guía se tomo un café antes de volver porque ninguno esperaba lo que se venia. Cuando estábamos saliendo del parque vimos en el horizonte que adelante se caía el cielo y había muchos truenos y relámpagos… y nosotros íbamos en esa dirección. El guía cerro los laterales de la camioneta pero esta no era una camioneta normal, era una Hilux de techo abierto donde el techo era una lona y las paredes lonas impermeables también. El problema fue que entramos a la tormenta del siglo… el viento y la lluvia eran MUY fuertes y estaba toda la ruta inundada. El chofer manejaba a los piques y no se bajaba la velocidad cuando la ruta estaba inundada. Nosotros estábamos adentro de la caja y descubrimos que los cierres no eran impermeables y que el techo llovía por las costuras, por lo que no solo temíamos por nuestras vidas sino que mientras tanto nos mojábamos y congelábamos… un horror. Hay un video que muestra nuestra situación en LA TORMENTA PERFECTA.
Una vez superado ese desafío y cuando la lluvia cesó un poco (siguió igual toda la noche pero con menos fuerza) llegamos al camping y la luz estaba cortada. Comimos a la luz de las velas y rezamos que nuestra carpa si fuera impermeable. Para colmo nuestra carpa era la última del campamento por lo que teníamos 5 minutas de caminata entre el barro y la lluvia. Por suerte cuando llegamos estaba sequita y nos metimos a dormir mientras escuchábamos como el mundo se caía afuera.
Al la mañana siguiente el techo de la carpa era una pileta, de la cantidad de agua que había acumulado pero nada había entrado. Ese día ya desayunamos y nos dirigimos rumbo a Johannesburgo, donde al día siguiente nos esperaba el vuelo a las Victoria Falls!